Una fruta muy pequeña, verde por dentro y por fuera y llena de superpoderes... ¿Está pensando en un kiwi? Puede que sea lo primero que se le venga a la cabeza, pero no es la fruta de la que vamos a hablar. Piense en un kiwi en formato mini. ¿De qué fruta hablamos? ¡De su hermano pequeño, el kiwiño

Una bayas del tamaño de un bocado

El kiwiño se puede comer entero directamente de la caja, sin pelar, sin cortar y sin cuchara. A diferencia del kiwi clásico, el kiwiño no tiene esa piel peludita; su piel es suave, verde y comestible. Esta fruta del tamaño de una uva de mesa (entre dos y tres centímetros aproximadamente) tiene un sabor dulce y sorprendentemente intenso.

El pariente supersano del kiwi

Este pariente pequeño del conocido kiwi es en realidad una bomba de vitaminas. Los kiwiños son ricos en vitaminas A y C, que refuerzan el sistema inmunitario, y además tienen mucha fibra alimentaria, lo que los convierte en el tentempié perfecto. El kiwiño se suele usar para postres, smoothies o sabrosos tentempiés.

Un trotamundos 

La Actinidia arguta (nombre científico del kiwiño) proviene del sureste de Asia. Allí esta fruta de la familia Actinidiaceae crece en largas vides que trepan y se enredan en otros árboles. Actualmente la fruta se cultiva en muchas partes del mundo: desde Nueva Zelanda hasta Francia, desde Chile hasta los Países Bajos, España, Portugal y muchos otros. El kiwiño crece muy bien en suelos algo ácidos, con buen drenaje y de tierra suelta.

FLOR DE DOÑANA S.L. - Productor de kiwiño en España

GGN 4049928382283